En la actualidad, los factores ASG (Ambiental, Social y de Gobernanza) han pasado de ser una tendencia a convertirse en elementos esenciales para la generación de valor a largo plazo de toda organización. Las expectativas de inversores, reguladores y consumidores han transformado la sostenibilidad en un factor crítico que no solo define la reputación corporativa, sino también la capacidad de una empresa para superar los riesgos.
¿Qué son los riesgos ASG?
Abarcan una amplia gama de desafíos que las empresas y los Gerentes de Riesgo deben gestionar:
- Ambientales (A): Incluyen el impacto del cambio climático, la gestión de recursos naturales, la contaminación y el uso de energías renovables. El aumento de eventos climáticos extremos ha puesto de relieve la vulnerabilidad de sectores como la agricultura, la construcción, los seguros y reaseguros.
- Sociales (S): Se refieren a las condiciones laborales, la salud y seguridad de los empleados, la equidad de género, la diversidad y la inclusión. Una mala gestión social puede dañar la reputación de la empresa.
- De Gobernanza (G): Se enfocan en la ética empresarial, la transparencia, el cumplimiento normativo y el gobierno corporativo. Los escándalos relacionados con la falta de ética o corrupción pueden tener un impacto devastador en la confianza de los inversores y clientes.
Los riesgos ASG no solo son amenazas, sino también oportunidades para innovar y crear valor a largo plazo. La clave está en integrar estos factores en las estrategias de gestión de riesgos.
A continuación, algunos ejemplos de cómo se puede realizar esta integración:
- Evaluación del impacto de riesgos climáticos: Realización de un análisis de la vulnerabilidad de las situaciones de riesgo de la empresa frente a riesgos climáticos. Implementación de acciones para reducir las emisiones de CO2 en cada uno de los procesos de la cadena de valor de la empresa. Herramientas como el Task Force on Climate-related Financial Disclosures (TCFD) permiten a las empresas identificar, medir y gestionar estos riesgos de forma estructurada. Así como la monitorización continua de posibles amenazas por medio de plataformas que permiten visualizar los riesgos climáticos en tiempo real.
- Compromiso social y derechos humanos: Contar con un sistema de trazabilidad del producto, evaluar las políticas sociales de nuestros proveedores y establecer programas de monitoreo para garantizar condiciones laborales justas. Cuidar la cultura organizacional de la empresa con evaluaciones continuas.
- Gobernanza corporativa y transparencia: Mejorar las estructuras de gobernanza de la empresa y contar con un portal de transparencia. Esto incluye la implementación de políticas más estrictas en cuanto a ética, auditorías internas y diversidad en los consejos directivos.
Los beneficios de gestionar los riesgos ASG
- Mayor resiliencia: Integrar los riesgos ASG en la planificación estratégica permite que las empresas estén preparadas ante cambios regulatorios o eventos externos, como desastres naturales.
- Atracción de inversiones: La gobernanza sólida no solo mitiga el riesgo de escándalos, sino que también atrae a inversores socialmente responsables que buscan empresas éticas.
- Mejor reputación y lealtad del cliente: Las empresas que muestran un compromiso genuino con los factores ASG son vistas de manera más favorable por los consumidores.
La integración de los riesgos ASG no es solo una medida preventiva, sino una estrategia de crecimiento que permite a las empresas ser más competitivas y sostenibles a largo plazo. Los gerentes de riesgo deben considerar los aspectos ambientales, sociales y de gobernanza como piezas clave para la continuidad y el éxito empresarial. En definitiva, los factores ASG son el futuro de la gestión de riesgos.